Siempre buscamos crecer. Crecer lo mas rapido posible, dejar de ser niñas. Queremos pintarnos para estar mas guapas, ponernos tacones para estilizar la figura y escote para llamar la atencion. Queremos llegar a las tantas, salir de fiesta y emborracharnos hasta perder el sentido. Queremos probar cosas nuevas, experimentar, enamorarnos, viajar, sentir. Creemos tener las ideas claras y estar rodeados de amigos. Creemos que somos invulnerables y que nada puede hacernos daño. Pero por suerte o por desgracia, tarde o temprano terminamos creciendo, y empezamos a darnos cuenta de que no todo es como queremos ni mucho menos como esperamos. Y es ahi cuando empiezas a ir despacio, y donde te percatas de lo poco que has disfrutado por querer vivir deprisa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario